Cada vez que planeo visitar un nuevo lugar, después de realizar toda la investigación, escribo tres experiencias simples que definitivamente quiero sacar de ese lugar. Estos son mis objetivos.
Dependiendo de la duración de la estadía, podría tener más o menos, pero tres es generalmente un buen punto de partida. De esta manera, mantengo mis planes fluidos, me permite explorar los alrededores. Podría haber mercados nocturnos, conciertos locales, nuevos lugares, etc., que aún no hayan adquirido el interés de los viajeros convencionales. Los conozco a través de la gente local en el hostal u hotel. No tener demasiados objetivos me permite disfrutar plenamente de mi tiempo. Al mismo tiempo, la lista me proporciona una dirección clara.
Por ejemplo, mi último viaje a Japón tenía esto en la lista
- Cumbre Mt. Fuji
- Comer en el restaurante Michelin Star
- Tokyo Night Life
Aunque hice muchas otras cosas que son turísticas, mi viaje siempre gira en torno a estos tres. Lo suficiente como para recordar el viaje para siempre.