Usted escribió “Siento que el joven de 25 años se divertiría más debido a las ventajas de la juventud: más poder social, atractivo, etc.” Esa es una forma extraña de ver los placeres de viajar y, tal vez, depende de su definición de la palabra ‘diversión’.
Todavía viajo por la tierra totalmente solo, y lo disfruto mucho más ahora que tengo más de 60 años y puedo moverme con confianza, hablar con cualquiera, y nadie jamás me confundirá con una marca fácil. Hay mucho, mucho más poder social en ser un adulto fuerte, amable, modesto, cortés, conocedor, sin prejuicios y de buen humor, especialmente en países donde se respeta la edad … que está en casi todas partes. El sexo está fuera de la mesa, por lo que ahora puedo interactuar abiertamente con personas de todos los géneros y edades, sin que los hombres se sientan obligados a hacer pases o algo peor, y sin que las mujeres sientan que tienen que preocuparse. Ahora somos solo personas juntas.