Vengo de Francia, así que básicamente todo es diferente de donde vengo, pero aquí hay una pequeña lista de las cosas que probablemente fueron las más diferentes:
– El aire: el olor y la sensación ambiciosa es muy diferente de lo que estamos acostumbrados a tener en Francia. Sentí que olía a especias donde sea que puedas ir.
– Toda la arquitectura es muy diferente de la que tenemos aquí.
– La comida, muy picante pero genial, me enamoré de Lentil Dahl y Naans y muchas otras cosas.
– La gente, no digo que todos fueran agradables conmigo, pero conocí a algunas personas realmente preciosas allí y tuve grandes conversaciones con algunos de ellos, la opinión que tenían sobre algunas cosas fue realmente inspiradora.
– Los colores: en Francia y quizás en la mayoría de los países europeos, la gente usa principalmente negro, los edificios son grises o blancos viejos … Nunca se ven tantos colores como en India.
– La ropa de la gente: por las mismas razones que la que acabo de decir, tan colorida.
– Los animales: ¡nunca tendrás la oportunidad de ver un elefante en una calle de la ciudad francesa, y menos aún de que un mono te robe el pastel!
– Los edificios y sobre todo los templos son impresionantes.
– Los rickshaws y también esta capacidad que hace que haya 100 personas en un autobús que normalmente tiene 20 asientos.
Y una cosa que era diferente pero que absolutamente no me gustó:
– El tamaño de los insectos !!!